Vivir en el extranjero no es para nada certero ni rápido, ya que esta experiencia te va a forzar a salir de tu zona de confort, ya que en esta nueva vida no conocerás nada y nadie en el nuevo país. Pero para mi ha sido la mejor decisión que he tomado en mi vida, pues me ha aportado mucho durante estos últimos 5 años. Aquí las 4 lecciones de vida que he aprendido viviendo en Francia: 

Paciencia

Muchas situaciones no pasan como yo quiero que pasen y cuando yo quiero que pasen.

Francia tiene muchos tramites administrativas, los cuales se deben cumplir como ciudadano y mas como inmigrante. Procesos que pueden ser largos, engorros y frustrantes. Por lo cual, este País me ha obligado a reducir la velocidad y aceptar las cosas como son, en lugar de dejarme molestar por ella.

Apreciar las diferencias

Aprendí a disfrutar las diferencias culturales e incluso las diferencias de opiniones. Esta experiencia de vivir en el extranjero me hizo mas tolerante a las diferencias de todo tipo, de género, de raza, de tradiciones, de formas de expresión. 

Ahora soy una persona mas abierta a vivir nuevas experiencias, aprender de los otros y de sus realidades, pues a veces de lo diferente aprendes, ya que al final lo que hace bello un arcoíris es su diversidad de colores. 

Independencia

Desde el día que me subí al avión y llegue a París, he aprendido a vivir sola completamente sin depender de otras personas para poder vivir mi experiencia. Pues fui forzada a aprender a cocinar (si a los 28 años aun no sabía a cocinar), a repartir hojas de vida por todos los restaurantes para encontrar un trabajo, a encontrar un departamento, a hacer mis tramites administrativos, a buscar ayuda jurídica cuando vi que mis derechos estaban siendo violados como estudiante extranjera, a levantarme nuevamente sola después de una separación, entre más. 

Esta experiencia ha mejorado considerablemente mi confianza en mí misma en todos los aspectos: personal, profesional y espiritual, pues me he mostrado que soy capaz de pasar todos los obstáculos que la vida me ponga.

No necesito de muchas cosas materiales para ser feliz

Vivir aquí me ha forzado constantemente a cambiar de hogar, pues la incertidumbre y el cambio están siempre presentes. Lo cual hizo que tuviera que estar cambiando de una casa a otra. 

Al final tengo la capacidad de meter mi vida en 2 maletas, pues solo tengo lo estrictamente necesario para ser yo y para crear mi hogar. Ahora tengo la capacidad de crear mi hogar, en cualquier lugar siempre y cuando este yo allí. 

Si quieres hacer parte de una comunidad mundial de mujeres que han emigrado y es un espacio de contención emocional, donde compartimos experiencias, se habla de información de valor como fuente de sonoridad entre mujeres, te recuerdo que te puedes unir al grupo privado de Facebook

Y si necesitas herramientas para transformarte viviendo en el exterior e ir por tus sueños, o si necesitas un apoyo para dar el salto y vivir en el exterior, te recuerdo que puedes agendar una sesion totalmente gratuita conmigo.